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Apasionado del deporte motor y de la fotografía. Reportero de atracción y comentarista de carreras. Los coches son increíbles pero solo cuando están en competencia.
Dicen que el dinero no compra la felicidad, pero cuando se trata de un automóvil esta frase puede resultar una mentira porque unos billetes pueden llevarte a dar el salto de un vehículo de volumen a un deportivo.
Pero para toda regla hay una excepción y también existen quienes dicen que el automóvil ideal y el que debes comprar es el que te emociona a diario al momento de verlo estacionado, sin importar si es un hatchback, sedán o el precio. Lo que importa es la conexión que genera contigo, sentir que cuando lo enciendes tu mundo cambia y puede transformar un mal día en un momento épico.
Ese enamoramiento llega desde el exterior porque como bien se sabe, de la vista nace el amor. El estándar ideal varía dependiendo los gustos de cada persona, habrá quienes lo prefieran sin cajuela y otros quienes busquen el espacio posterior, pero sin importar ese detalle hay modelos que en cualquiera de sus dos variantes nos sacan una sonrisa al conducir y ese es el caso de KIA Forte Sedán.
En nuestras manos tuvimos la oportunidad de probar la versión GT Line que hereda el paquete estético del tope de gama llamado GT. Esto ayuda para ofrecer una imagen deportiva en el exterior que lo distingue de las versiones L, LX y EX, con espejos laterales con alto brillo, rines de aluminio de 17 pulgadas contra los de 16 de serie, quemacocos eléctrico y tubo de escape doble cromado.
Mientras algunos se atreven a decir que los sedanes están muertos y tienen los días contados antes el crecimiento continuo de los SUV, Forte nos recuerda porque estos modelos aún son buscados. Quien compra un coche de este tipo quiere espacio, con un diseño atractivo como el que se hereda de Stinger y con una dinámica de manejo que las camionetas de ese precio no pueden ofrecer.
En el interior, GT Line y GT son casi idénticos, con asientos deportivos e interiores que, a pesar del paso de los años desde el lanzamiento de la tercera generación en 2018 y un facelift realizado en 2021, se mantiene no sólo vigentes, sino además con un periodo de gracia que les permitirá seguir luciendo actuales por muchos años más.
Sumado a esto el sistema de infoentretenimiento actualizado y desplegado en una pantalla táctil de 10.25 pulgadas nos mantiene en nuestra vida digital, siempre preservando nuestra seguridad sin desviar la mirada del camino.
La misión con el sedán era llegar a Guanajuato para la arrancada del Rally de las Naciones, una competencia que sustituyó este año la visita del Campeonato Mundial de Rallies a nuestro país. Si bien existía la oportunidad de ir en avión una de las grandes ventajas de esta competencia es aprovechar la dinámica de las autopistas hasta León para conocer el desempeño de un vehículo gracias a sus rectas largas, curvas de media y alta velocidad.
Aunque la versión GT Line no tiene el motor turbocargador 1.6L de 201 caballos de fuerza, sino el L4 2.0L de 147 caballos y 132 libras-pie de torque unido a una caja IVT, esto no demerita al coche. Su rendimiento en carretera nos permitía rebasar sin complicaciones y presionar a algunas camionetas que padecían en las curvas donde desde metros previos se advertía frenarían mientras Forte nos permitía mantener la trayectoria con la misma velocidad.
La caja IVT diseñada por la compañía coreana cumple con lo esperado, pero el control de las paletas de cambios facilita las maniobras en autopista dando una sensación de tener la caja manual a nuestro servicio para aquellos amantes de sentir el paso de los engranes en cada maniobra.
Una de las grandes preocupaciones y mitos de las cajas automáticas es su alto consumo de combustible. De los 50 litros de la capacidad del tanque apenas necesitamos un poco más de la mitad para llegar desde la Ciudad de México a nuestro destino en León, Guanajuato, antes de regresar a la Alhóndiga de Granaditas, con una velocidad de 110 km/h en la mayoría de los tramos. Nada mal para un viaje de aproximadamente cuatro horas.
La comodidad es un aspecto que destaca en KIA Forte Sedán. El espacio de la fila trasera es ideal para que tres adultos viajen sin quejas en carretera. La reducción de detenciones para estirar las piernas pueden ahorrarte unos cuantos minutos de carretera y también enojos innecesarios que te borren la sonrisa de la agradable experiencia que es manejarlo.
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Aclaración: El contenido mostrado es responsabilidad del autor y refleja su punto de vista, mas no la ideología de atraccion360.com
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